Liderazgo
"El cuerpo debe ser tratado con rigo, para que no desobedezca a la mente"— Séneca
El estrés es visto como el enemigo del éxito, pero ¿y si en realidad fuera un motor clave? Lo que nos desgasta no es el estrés en sí, sino nuestra incapacidad para regularlo.
Existe una máxima del alto rendimiento que dice: estrés+descanso= crecimiento; estrés+estrés=decrecimiento.
El estrés no es malo por sí mismo. Es una respuesta biológica diseñada para prepararnos para la acción.
Pero cuando se activa constantemente sin regulación, nos agota mental y físicamente. Existen dos tipos de estrés:
- Eustrés (Estrés positivo): Impulsa el crecimiento y la motivación.
- Distrés (Estrés negativo): Nos paraliza o agota.
La clave es aprender a mantenernos en el lado del eustrés, utilizando estrategias que nos permitan recuperar la calma sin perder energía.
Grandes líderes, atletas y emprendedores han aprendido a transformar la tensión en enfoque, energía y resiliencia. Y esto no es algo nuevo: a lo largo de la historia, personas como Marco Aurelio, Winston Churchill, Nelson Mandela, Theodore Roosevelt e Yvon Chouinard enfrentaron presiones extremas y desarrollaron estrategias para mantenerse firmes en medio del caos.
Vamos a explorar cómo podés hackear tu estrés a través de estrategias y las lecciones de grandes líderes.
1. Marco Aurelio y la Resiliencia Estoica
Marco Aurelio gobernó el Imperio Romano entre el 161 y el 180 d.C., en un periodo de crisis marcado por guerras, traiciones y una devastadora pandemia conocida como la Peste Antonina. Como emperador, enfrentó una presión extrema y, en lugar de dejarse consumir por la ansiedad, recurrió al estoicismo para mantenerse en equilibrio.
Estrategia: Visualización Negativa
Los estoicos practicaban la premeditatio malorum, un ejercicio en el que imaginaban los peores escenarios posibles para reducir su impacto emocional si llegaban a ocurrir. Marco Aurelio escribía en su diario reflexiones como:
"Hoy enfrentaré personas ingratas, crueles e ignorantes. Pero sé que la virtud está dentro de mí, y nadie puede quitarme el control de mi mente."
Si el estrés te abruma, escribí tus pensamientos en un diario o preguntate: “Si esto pasara de la peor manera, ¿qué haría?” Verás que muchas veces el miedo se disuelve al enfrentarlo racionalmente.
2. Winston Churchill y la Claridad Mental en el Caos
Winston Churchill lideró Gran Bretaña durante la Segunda Guerra Mundial, un periodo en el que la nación enfrentaba bombardeos constantes y el futuro era incierto. La presión sobre él era abrumadora, pero gracias a los hábitos que había mantenido durante su vida, pudo tomar decisiones con lucidez bajo el estrés extremo.
Estrategia: Pausas Estratégicas
Churchill tenía una rutina constante: tomaba siestas de 20 a 30 minutos cada día. Creía que esto le permitía "doblar" su jornada de trabajo sin agotarse. Las neurociencias moderna confirma que las siestas cortas mejoran la memoria, la toma de decisiones y la regulación del estrés.
Cuando te sintás saturado, en lugar de seguir forzándote a ser productivo, tomá una pausa. Si te encontrás con falta de claridad y con compulsiones por entregar tu atención a las redes sociales, es probable que estés con cansancio. La solución perfectamente puede una siesta corta, una caminata o cinco minutos de respiración consciente. Estas pausas recargan tu mente y mejoran tu rendimiento.
3. Nelson Mandela y la Paciencia Estratégica
Mandela pasó 27 años en prisión antes de convertirse en el primer presidente democrático de Sudáfrica. Durante su encarcelamiento, en lugar de ser consumido por la desesperación, utilizó el tiempo para fortalecer su mente y prepararse para el liderazgo.
Estrategia: Visualización Positiva
Mandela no solo sobrevivió en prisión, sino que salió fortalecido porque practicaba la visualización positiva: imaginaba un futuro donde Sudáfrica fuera libre y él pudiera liderar la reconciliación del país. Esta práctica lo ayudó a mantener la esperanza y la determinación.
Si el estrés te hace sentir atrapado, cerrá los ojos y visualizá tu vida después de superar el desafío actual. ¿Cómo te sentirás? ¿Qué habrás aprendido? Este ejercicio te ayuda a cambiar tu enfoque de la ansiedad a la resiliencia.
4. Theodore Roosevelt y el Estrés como Energía en Movimiento
Theodore Roosevelt fue un presidente hiperactivo que enfrentó desafíos físicos y políticos constantes. Desde niño sufrió de asma severa, pero en lugar de resignarse, adoptó una mentalidad de acción: fortaleció su cuerpo con ejercicio y enfrentó sus miedos con audacia.
Estrategia: Movimiento
Roosevelt usaba la actividad física para canalizar el estrés. Practicaba boxeo, montañismo y exploraciones extremas. Sabía que la acción física ayudaba a despejar su mente y a recuperar su equilibrio emocional.
Cuando el estrés se acumule, movéte. No hace falta que seas un atleta. Una caminata, un poco de estiramiento o incluso bailar tu canción favorita pueden ser suficientes para liberar tensión y ganar claridad mental. Al vivir una experiencia de mente-cuerpo, necesitamos estimular nuestra mente y nuestro cuerpo por igual.
5. Yvon Chouinard y el Liderazgo Empresarial con Propósito
Yvon Chouinard, fundador de Patagonia, no es un empresario convencional. Recuerdo que mi amigo Mauricio Jiménez de Pejibaye Consulting, quien trabajó algunos años con Yvon, me contaba sobre las famosas interrupciones en medio de las tareas cotidianas para ir a surfear en medio del día de trabajo.
Chouinard, comenzó fabricando su propio equipo de escalada en la década de 1960, sin imaginar que crearía una de las marcas más influyentes en sostenibilidad. A lo largo de su carrera, enfrentó múltiples crisis empresariales, desde problemas financieros hasta boicots por sus posturas ambientales. Sin embargo, en lugar de ceder ante el estrés, usó su filosofía de vida para tomar decisiones alineadas con sus valores.
Estrategia: Priorizar el Propósito y los valores
En los años 90, Patagonia enfrentó un gran dilema: sus materiales contaminaban el medio ambiente. Muchas empresas habrían ignorado el problema por miedo a las pérdidas, pero Chouinard decidió asumir el riesgo: invirtió millones en transformar su producción en ecológica. La apuesta fue un éxito, fortaleciendo la marca y fidelizando a sus clientes.
Más tarde, en 2022, tomó una decisión aún más radical: donar la empresa para que todas sus ganancias se destinen a combatir el cambio climático.
En su libro Let My People Go Surfing: The Education of a Reluctant Businessman, Chouinard expone su visión única del liderazgo y los negocios.
Para él, el éxito no se mide en ganancias, sino en impacto. Patagonia no es solo una empresa; es una herramienta para cambiar el mundo.
Principios clave de su filosofía:
1. Flexibilidad y equilibrio: En Patagonia, la gente trabaja con horarios flexibles. Si las olas están buenas, pueden ir a surfear y luego volver al trabajo. El objetivo es fomentar una cultura donde la productividad se base en el bienestar, no en el control.
2. Calidad sobre cantidad: No busca crecimiento desmedido, sino hacer productos duraderos que reduzcan el impacto ambiental.
3. Negocios con causa: No ve a Patagonia como una empresa para hacer dinero, sino como un medio para transformar la relación entre el consumo y el planeta.
Si el estrés empresarial te hace dudar, preguntate:
"¿Estoy tomando decisiones basadas en el miedo o en mis valores?"
A veces, elegir el camino más alineado con tu propósito genera resultados más sostenibles a largo plazo. Además recordá, que siempre hay tiempo para ir a surfear— ejercitarte, moverte, despejarte y conectar socialmente.
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El estrés en la vida no va a desaparecer, pero podés aprender a utilizarlo a tu favor. Regulando tu sistema nervioso, cuidando tu cuerpo, cambiando tu mentalidad y aplicando estrategias probadas por los grandes líderes de la historia, podés lograr un alto rendimiento sin sacrificar tu bienestar.
Desde Marco Aurelio hasta Yvon Chouinard, cada líder ha enfrentado estrés de maneras distintas: con mentalidad estoica, con pausas estratégicas, con adaptabilidad o con un propósito firme. Pero la clave en todos los casos ha sido: no dejar que el estrés dicte sus decisiones y más bien aprender a gestionarlo. Personalmente, he encontrado herramientas que me han permitido tener una buena relación con el estrés y los momentos exigentes como la práctica de la filosofía para cambiar significados, el entrenamiento cotidiano y las inmersiones en hielo como aliados clave para mi mejor rendimiento.
🔥 Reto: Aplicá una de estas estrategias en tu vida diaria y observá cómo cambia tu relación con el estrés, transformándose en eustrés y energizándote para vivir una vida más alineada a tus valores.
Jorge
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