Filosofía Estoica
“No actúes como si fueras a vivir diez mil años; la muerte te ronda. Mientras vivís, mientras está en tu poder, sé una buena persona”. —Marco Aurelio
Esta no es una reflexión sobre la muerte, sino sobre la vida. Recordar nuestra brevedad es la herramienta más poderosa para disolver el drama y enfocar lo esencial. Marco Aurelio sabía que la mayor parte de nuestras ocupaciones son banales. Esta era la invitación para sí mismo de eliminar actos y pensamientos innecesarios para hacer espacio a una vida buena.
Estamos viviendo una epidemia de "estar siempre ocupado" para sentirnos útiles o hasta valiosos. No se trata de hacer más, sino de hacer cada cosa con intención. Preguntarnos constantemente, ¿es esto realmente necesario? es el antídoto estoico contra la creencia tóxica de que ‘estar siempre ocupado’ es sinónimo de valor.
El estrés no siempre grita. No es solo un ataque de pánico o la angustia por un futuro incierto. A menudo, es una obsesión intensa que nos lleva programar el ‘corre-corre’ como modus vivendi. Este ritmo implacable con el tiempo, se vuelve insostenible, agotando un cuerpo que también necesita descanso.
Cuando sentís que encadenás una tarea con la siguiente, sin aire entre ellas, recordá la sabiduría de la naturaleza: ningún árbol da frutos todo el año. ¿Por qué vos sí?. Necesitamos encontrar la manera de reunir energía y florecer a nuestro propio ritmo. Darnos permiso para desacelerar no es vagancia, es inteligencia biológica. Es frenar para continuar.
A veces, la acción más productiva es detenerse a respirar. Séneca lo expresó con claridad: “Retirate dentro de vos mismo”. Esta es una invitación a reconectar. En el silencio, la mente recupera su autonomía. Es ahí donde evaluamos si corremos por inercia o por convicción. Reconocemos nuestros motivos y purificamos la intención. Y recordamos que ninguna meta vale nuestra paz interior.
Cuando unís la conciencia de tu finitud con el poder del retiro interior, tu vida se transforma. La meta final sigue ahí, pero tu foco se ancla en el presente: el terreno que pisás, el aire que respirás, las decisiones que tomás ahora.
Disciplinar tu mente para la pausa parece ser un acto de rebeldía en un mundo acelerado. Y sabés que al hacerlo, te liberás de la presión de demostrar y te abrís al simple acto de vivir— de ser. Porque de eso se trata la vida: de aceptar, agradecer y prestar atención, en este preciso momento. Como dice el tao: "en la ausencia de deseos produce reposo. Y el mundo se pacifica por sí solo."
Jorge
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Como ya es costumbre, año a año me gusta detenerme, mirar hacia atrás y revelar la lista de libros que pasaron por mis manos. Esto lo hago como un acto de consciencia sobre la información que he consumido y para revelarte en dónde ha estado mi mente durante el año. Además, muchas personas me han compartido que valoran mucho las listas pues así tienen un punto de partida para agregar a sus bibliotecas personales. Para mí, los libros no son solo lectura. Son estímulos para la mente.
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Adquiera conocimiento













